Estampas de la orfandad

Alejandra Monroy V.
2 min readJul 3, 2021

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Todos seguimos tristes, cada uno a su manera, tú nos conocías mejor que nadie, sabes que Leto llora, Clo se ocupa, Car y Raúl callan. Tal vez yo te sorprendería, más que llorar te pienso, te pienso bonito. El dolor está ahí, sublimado, agazapado como un gato pequeño que de pronto da saltitos que causan ternura y risa. Las lágrimas que me dejaste son dulces como tu sonrisa.

Para despedirte Clo juntó un álbum con tus fotos. Te vimos niño, joven y adulto y todos descubrieron nuestro secreto, soy yo la que más se parece a ti. Al ver a mis hermanos el parecido era evidente; nosotros lo disimulábamos mejor, nunca lo alardeamos, pero yo lo conocía porque veía tu barbilla en mi reflejo y sé que cuando nací pusiste tu mirada en la mía y ahí se quedó para siempre.

Se empiezan a notar las cosas que perdimos cuando te fuiste, las grandes y las pequeñas. Hace unas semanas no supimos preparar la salsa para el pozole, todo creíamos tener la receta, recordar cómo debía verse, qué sabor tenía, pero la certeza no llegó; mi mamá preparó una muy buena pero no era igual a la tuya. Comimos en silencio y a mí me pareció escucharte decir “¿cómo voy a creer que no supieron hacer la salsa?”, el nudo en la garganta me recordó los olores y sabores que te llevaste.

Nadie nunca volverá a llamarme Pelona, ni a reírse como tú al verme bailar en la cocina, nadie me dirá “por favor avísame cuando llegues” ni “descansa, hija, gracias por hablar”, pero siempre que llego tarde a mi casa sigo pensando: “ya llegué, pá” y entonces puedo dormir.

Las cosas empiezan a retomar ritmo, te gustaría vernos juntos de nuevo celebrando los cumpleaños y los logros, tus nietos son cada vez más grandes y no sólo de edad, tú me entiendes. Cuando te mencionamos se hacen pequeños silencios, los ángeles que roban voces revolotean sobre nuestras reuniones siempre ruidosas.

Parla todavía te busca en tu cuarto, olfatea con insistencia el clóset donde sigue tu ropa y me reclama por no encontrarte, con un mimo le digo que yo también te extraño y que ojalá tuviera su olfato para sentirte tan cerca como lo hace ella.

Lo que te prometí ese viernes antes de irme lo voy a cumplir. No va a ser fácil, tú sabes por qué, pero ya estoy trabajando en ello, por ti pero sobre todo por mí. En tu honor y en el mío estoy dejando el miedo y preparando el entusiasmo. No puedo darte una fecha, tú sabes por qué, pero va a pasar, pá.

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Alejandra Monroy V.
Alejandra Monroy V.

Written by Alejandra Monroy V.

Estudié diseño y me asombran los humanos, la naturaleza y la ciencia.

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